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Cumpliendo la profecía hecha en algún momento por el desaparecido cantautor vallenato Diomedes Díaz Maestre, que La Junta y Carrizal, se harían famosas después de su muerte.

En esta Semana Santa se observaron miles de turistas atraídos por el éxito de la novela basada en su vida y obra, emitida de lunes a viernes por un canal de televisión privado y aprovechando las vacaciones, acudieron a estas  poblaciones ubicadas a 16 kilómetros del casco urbano del municipio de San Juan del Cesar.

Muchos turistas se olvidaron de los sitios turísticos que tiene la parte Norte de La Guajira como son Cabo de la Vela, Riohacha, Mayapo y Dibulla.

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Según las estadísticas hechas a groso modo por los junteros, durante la Semana Santa, alrededor de 15 mil turistas y 5 mil vehículos,  provenientes de todos los rincones del país visitaron al corregimiento de La Junta y a la finca Carrizal con el objeto de recorrer los lugares donde vivió Diomedes Díaz la mayor parte de su vida, haciendo la denominada Ruta de ‘El Cacique’.

Se pudo observar las largas filas hechas por los visitantes para lograr una foto en la emblemática Ventana Marroncita, lugar dónde el  cantautor le ponía serenatas a su adorada Patricia Acosta e inmortalizada en una de sus canciones, que por estos días es interpretada por las voces de hasta los niños más pequeños, que la escuchan en cada capítulo de la polémica novela.

Atractivos de la ruta

Las caras ansiosas de los turistas ávidos de información que le permita conocer más detalles de la vida del artista se veían cada día y buscaban afanosamente a algún amigo cercano a Diomedes para que le aclarara algunas dudas que tenían o les contara anécdotas inéditas del personaje que hizo famosa a La Junta y Carrizal con sus canciones.

“Vea periodista, esta romería de fanáticos de Diomedes se presenta todos los días desde que él murió, pero en esta semana se han incrementado en un 500 por ciento, yo creo que es aprovechando las vacaciones de Semana Santa”, expresó Luís Alfredo Sierra, sentado en una silla en su casa, contándole a un grupo de turistas provenientes de Valledupar, varias vivencias del Cacique.

No conformes con hacer una interminable cola y aguantarse el canicular sol para tomarse las fotos en la Ventana Marroncita y entrar a la habitación de Patricia Acosta para registrar la  fotografía en la cama donde pasaba las noches, la adorada de Díaz Maestre, los turistas desafían las altas temperaturas y lo escarpado del terreno y transitan en vehículos alrededor de 8 kilómetros para llegar a Carrizal.

En esa finca se construye el museo de Diomedes, allí se puede observar la primera cama matrimonial del Cacique y Patricia, una vestidura, unas botas y un chinchorro usados por el cantautor, lo mismo que un envase del perfume favorito del más célebre hijo de estas tierras.

En el mismo lugar hay ciento de fotografías que describen con imágenes la vida del Cacique desde su infancia hasta el momento de su muerte y una réplica de la casa donde nació y vivió  con sus padres y hermanos los primeros años de su existencia.

Aunque los amigos y familiares de Diomedes, hicieron una fundación que se encargará de preservar y difundir aún más la obra del cantautor, el museo aún no se ha creado como tal, le faltan guías que  les expliquen a los visitantes cada uno de los elementos allí encontrados, porque hasta ahora los turistas llegan allí y hacen el recorrido sin alguien que les indique lo que están observando.

Pese a que el recorrido es arduo, los fanáticos de ‘El Cacique’ y curiosos, pueden almorzar en el restaurante abierto en el mismo museo o en algún estadero de La Junta, que se instalaron para aprovechar la afluencia de público, donde se pueden escuchar las canciones de Diomedes Díaz, mientras se deleita con un suculento almuerzo típico de la región.

Igualmente, la fama que le ha traído Diomedes Díaz a estos lugares que unos años atrás eran prácticamente anónimos para la mayoría de los colombianos, es aprovechada para vendedores ambulantes y artesanos que ofrecen a  los turistas gran variedad de productos, que van desde una bolsa de agua, hasta la más exótica mochila con el nombre de Diomedes Díaz, tejido en letras de vistosos colores.

“Desafortunadamente, los junteros no dimensionamos el furor que se nos venía con la novela de Diomedes y no estábamos preparados para atender la cantidad de turistas, estamos haciendo lo humanamente posible para que la gente se sienta a gusto y pueda disfrutar de su visita a nuestro pueblo, esperamos prepararnos mejor para el Festival Vallenato, porque creemos que se va a presentar el mismo fenómeno”, dijo Rafael Maestre, presidente de la Junta de Acción Comunal de la Junta.