En las esquinas se encuentran estos recipientes para aprovisionarse de agua
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La ilusión de contar con un mejor servicio de agua que funcionara en su mismo espacio geográfico, trayendo solución con el suministro se vio realizada cuando se inició en el corregimiento de Camarones la construcción del acueducto.

La obra comenzó en junio del 2012 de la mano de la contratista Agua para el Pueblo, que para diciembre del 2013 había realizado la entrega parcial del acueducto a Rafael Ricardo Ceballos Sierra, quien fuera alcalde para ese entonces.

“El acueducto lo entregaron inconcluso, según lo culminarían el año entrante, 2014, pero quedó así, le falta un tramo y eso ha causado grande fallas”, expresó Eduar David Barros, encargado de suministrar el agua al corregimiento.

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Para los habitantes, el proyecto ha perturbado la salud, la economía y la convivencia entre vecinos, ya que según ellos, el agua no es apta para el consumo humano, ha causado enfermedades del estómago y la piel y solo la utilizan para hacer aseo.

Esta situación los lleva a comprar casi diariamente el agua a los carrotanques que llegan hasta el lugar, lo que afecta su economía, los precios van desde los siete mil hasta los 100 mil pesos dependiendo el recipiente de agua.

Y desde hace tres semanas el fontanero se tomó las instalaciones, en protesta por falta de pago, esto agrava la situación y tiene en controversia a los pobladores.

Eduar David, comentó que el proyecto no ha sido entregado oficialmente y falta un tramo de la obra, es por esto que el proceso de purificación no se completa y actualmente una falla eléctrica hace que el bombeo sea deficiente. La contratista Aguas para el Pueblo no da respuesta alguna.

“El alcalde suspendido Fabio Velázquez Rivadeneira había asumido el mantenimiento pero quedó solo en conversaciones y actualmente la administración distrital no responde, solicitamos a la Alcaldesa que haga el llamado al contratista” manifestó.

Los habitantes esperan que se atienda la problemática, consideran que el servicio era mucho mejor cuando llegaba desde Riohacha, y ahora que está más cerca no sirve, para ellos fue peor el remedio que la enfermedad.