Con esa contundencia se refirió contadora pública Cinthya Ardila Socarrás, quien obtuvo la tercera credencial del partido Mais, en las pasadas elecciones regionales que se efectuaron el 27 de octubre.
Precisó que ella permaneció durante 11 días protegiendo sus votos y lo hizo de día y de noche, «pero definitivamente en Riohacha las elecciones no se ganan en las urnas, se ganan en los escrutinios. Toda la semana estaba con credencial y de un momento a otro me dicen que ya no estaba en la lista».
Por fortuna dice Cinthya que ella tenía todo controlado con las herramientas tecnológicas «tenía todo registrado en vídeos y se apoyaba con cuatro abogados, dos ingenieros de sistemas y alrededor de 30 personas acompañándose tres por cada comisión».
Advierte que esta es otra campaña la que se tiene que hacer, además tenía dificultad con la Policía que no le permitía que metiera a su gente para que le ayudara a proteger sus votos.
«Es un proceso muy difícil, porque luego uno pestañe ya desaparecen los votos. En la comisión 8 notó unas irregularidades que no concordaban los E14 con los vídeos y con las proyecciones que teníamos. Procedimos a solicitar una reclamación y nos dimos cuenta que los votos eran míos».
Reconoce que la diferencia no fue mucha, porque el partido de la Convergencia nos iba alcanzando y bueno, tenemos la credencial y al final obtuvimos 979 votos.
Sin embargo, no todo está dicho, el candidato de Convergencia, Francisco Pushaina ha realizado una reclamación sobre la mesa en cuestión que podría darle la credencial que hasta el momento sería de Cinthya Ardila Socarrás.