La tarea comienza temprano y es todos los días. Tanto los funcionarios de la secretaría de Salud como la Policía están en constante movimiento en aras de buscar que la ciudadanía se cuide y maneje los protocolos para evitar el contagio del coronavirus.
Es una lucha permanente en vista que muchos se resisten a conservar las medidas, permanecer en sus casas si no tienen pico y cédula y ser cautelosos con la distancia, el uso de los tapabocas y lavarse las manos como se recomienda.
Muy a pesar de las advertencias que se han vuelto ya reiterativas y cotidianas, el común de las personas olvida que deben prevenir. La mayoría de las sanciones son por salir a la calle sin los tapabocas y por estar en la calle sin que el pico y cédula se los permita.
La comunidad soporta sus argumentos en que deben salir a buscar la comida o a vender algo para encontrar el sustento de la familia, mientras que otros opinan que de algo se tienen que morir y que el virus al que le va a dar le da.