Con una andanada de versos, de esos mismos con los que se dio a conocer, que le dieron fama y triunfos en la serie de festivales donde compitió, fue despedido en el cementerio del corregimiento de El Hatico, tierra que lo vio nacer, al repentista, Luis Enrique Manjarrés Solano la tarde de este domingo.
El llanto se conjugó con la música y cantos, para decirle adiós a uno de los más encopetados bardos, que junto a su hermano Alcides, conformaban la dinastía musical de ‘Los Cieguitos’. Y es que cuando de improvisar se trataba, Luis Manjarrés de 68 años de edad, era uno de los más curtidos en la materia de ahí el porqué, logró coronarse campeón en diferentes eventos folclóricos donde se presentó en el concurso de la piqueria.
Partió de este mundo Luis el cieguito, a ripostarle ahora en el cielo a otros similares en su género musical que también partieron, como Rubén Toncel, el urumitero Luis José ‘El Mono Fragoso’ y ‘Toño’ Salas.
El homenaje póstumo que se le rindió estuvo a cargo de la administración municipal, la Asociación de Festivales de La Guajira y la corporación artistas de Fonseca (Coarfon).