Las honras fúnebres tuvieron lugar al concluir un complicado proceso que incluyó la repatriación de su cuerpo
Este lunes se llevó a cabo el sepelio del joven artista Emanuel Lázaro Ospino, quien falleció en Madrid, España, hasta donde había viajado con el sueño de consolidar una promisoria carrera musical, pero su vida se vio truncada tras una repentina complicación de salud.
Emanuel Lázaro, originario de Maicao, partió hacia Madrid el 26 de septiembre con la ilusión de continuar su carrera artística en el extranjero. El 28 de septiembre, en su última comunicación con la familia, Emanuel les informó a través de un mensaje de audio que se sentía muy enfermo y que ingresaría de urgencia en un hospital. Luego de esa comunicación, la familia perdió contacto con él, lo que generó una angustia indescriptible seguida de una intensa búsqueda en los hospitales madrileños.
El domingo, tras varios intentos, las hermanas del joven lograron comunicarse con el hospital 12 de octubre, donde confirmaron la noticia más temida: Emanuel había fallecido tras ingresar en estado crítico.
Al conocer el devastador anuncio, la familia Lázaro Ospino inició los trámites para la repatriación del cuerpo a Colombia, un proceso que se extendió durante casi tres semanas debido a las complicaciones logísticas y los elevados costos.
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El apoyo de las autoridades consulares de Colombia en Madrid, así como de algunos conocidos residentes el España y el aporte desinteresado de personas de buen corazón, fue fundamental para que el cuerpo de Emanuel pudiera regresar a su tierra natal.
Finalmente, el cuerpo de Emanuel llegó a Maicao en la medianoche del domingo, en medio del torrencial aguacero y los fuertes vientos que azotaban la ciudad. El joven fue recibido con gran consternación y dolor por su familia, amigos y la comunidad.
La ceremonia de despedida se realizó en la casa de sus padres, los pastores José Lázaro y Delfina Ospino, en una ceremonia cristiano-evangélica que contó con la presencia de centenares de personas. Posteriormente, el cuerpo fue trasladado al cementerio Colombo Árabe, donde fue sepultado en medio del llanto y las oraciones de sus seres queridos.
Emanuel Lázaro Ospino, quien nació en Maicao en 1994, era el tercero de cuatro hijos. Había estudiado en el Liceo Latinoamericano y se destacaba como músico. En su corta carrera artística, grabó varios temas juveniles como Pasa el tiempo, Cansado y Linaje escogido, con los que ganó reconocimiento en su comunidad. Su sueño de continuar su producción musical en Europa fue truncado por su inesperada muerte.
La ciudad de Maicao despidió a uno de sus jóvenes más prometedores, cuya vida quedó marcada por su pasión por la música y el arte, pero también por el dolor de una partida prematura.