Ahora el epicentro es Riohacha
Ahora el epicentro es Riohacha.
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La pandemia sigue su curso. La letal enfermedad covid-19 no discrimina raza, color, edad, sexo o religión. La población entera se come las uñas y cuenta cada minuto esperando a que la bendita vacuna salga al mercado, mientras los mandatarios diseñan estrategias que reduzcan los impactos del catastrófico virus.

En términos generales, La Guajira ha mantenido números bajos, si se le compara con otras regiones de Colombia. Sin embargo, las tendencias en materia de contagio para el Distrito de Riohacha en el presente mes, han colocado a la capital en el ojo del huracán.

Hace dos meses, Maicao era señalado como el municipio donde el coronavirus se campeaba por sus calles. Su alcalde empezó a tomar medidas, las cuales al parecer han dado sus frutos.

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Y es así, como los contagios en la ciudad del maíz se han reducido ostensiblemente. Por lo menos eso dicen los números bajos de los últimos días.

La otra cara de la moneda la vive Riohacha. Hace tan sólo dos meses, la capital guajira sacaba pecho. En ese momento de pandemia, los bajos niveles de contagio hacían pensar que todo marchaba bien. Las acciones y estrategias implementadas por el Alcalde y su equipo dieron sus frutos.

Pero últimamente, muchos ciudadanos no acatan las decisiones que toma la administración distrital y suelen violentarlas. Los días parecen normales y ni que decir de los fines de semana son comunes y corrientes. Los toques de queda decretados por el Alcalde, parecen simbólicos.

Si bien el señor alcalde ha cumplido al planear y decretar en medio de la dura situación, pareciera que las autoridades encargadas de hacer cumplir lo ordenado no están con el mismo nivel de compromiso.

Se le ha visto muy activo al secretario de Gobierno acompañado por la policía nacional vigilante por todo Riohacha. Lo cual está muy bien. Pero, las parrandas en cada esquina parecieran multiplicarse. ¿Qué pasa? ¿Será que apenas las autoridades se alejan de los jolgorios marchitos, estos germinan y con ellos florecen las peligrosas congregaciones?

No se puede ocultar que el tráfico durante los siete días de la semana, está retornando a los niveles que se tuvieron hace siete meses. ¿Qué hace falta para que coloquen en cintura a tanto conductor de vehículo? ¿O será que todos tienen permiso?

Es crucial que el señor alcalde y sus colaboradores se coordinen mucho más con los autoridades competentes y entre todos empiecen a ser más drásticos para hacer cumplir con las normas de bioseguridad implantadas, de lo contrario, este tema ya salido de las manos, pasará a tener consecuencias mucho más nefastas.