Cerca de 550 estudiantes de primaria de la institución educativa Isabel María Cuesta González y comunidad vecina están expuestos a una posible emergencia sanitaria de no recibir atención oportuna de la empresa Asaa por el desbordamiento de aguas negras.
2.905.344 pesos es la suma total del presupuesto realizado por la empresa Avanzadas Soluciones de Acueducto y Alcantarillado, Asaa ESP, a la Institución Educativa, por la construcción de acometida de alcantarillado, dada la solicitud presentada por el rector Winston Atuesta Mediño debido al rebose de aguas negras que se viene presentado por tuberías averiadas.
“Solicité el presupuesto ante Asaa y sorpresa que me lleve cuando recibí el oficio donde claramente me dicen que debo cancelar casi tres millones de pesos y en treinta días darán atención a la problemática, esta situación no puede esperar, los estudiantes están siendo afectados ya que actualmente no están utilizando las baterías sanitarias y eso es inhumano”.
Ocho días lleva el Rector diligenciando las posibles soluciones que eviten una emergencia sanitaria a causa de las aguas negras que se desbordan del registro de alcantarillado de la sede principal ubicada en la calle 15 con carrera 12, que sin percatarse estaba afectando a los vecinos de la calle 16 con los malos olores y el agua en plena vía.
“El viernes pasado una vecina se acercó hasta mi oficina para alertarme de lo que estaba sucediendo, fui hasta el lugar y ciertamente estaba el daño, el agua llegaba hasta la otra calle, de inmediato fui a la oficina de Asaa donde solicité la limpieza y sondeo del alcantarillado, para eso tuve que cancelar 143.046 pesos, pero los trabajadores no dieron con el daño y al día siguiente no volvieron”, explicó Atuesta Medriño.
Quien en vista de la situación que afecta a los estudiantes, docentes y la comunidad vecina, solicitó ante la empresa el servicio de sondeo profundo ya que la avería parece estar en la tubería madre, para esto deben romper el pavimento y construir el registro de alcantarillado, la realización de este trabajo está siendo valorado por un monto que a la Institución se le hace complicado cancelar.
Considera que es una situación agobiante ya que de no obtener repuesta se verá en la obligación de suspender las actividades académicas por protección a los estudiantes.
Puntualizó Winston Atuesta que “es insólito que la Institución sea un usuario que mensualmente cancela alrededor de los 500 mil pesos en servicio de agua entre las tres sedes y la respuesta que nos den es que debemos cancelar para solucionar, sin importar la salud y la formación de los niños”.