Yesid Marcelino Caro García (al fondo), se convirtió en un ayudante de albañilería, de la señora Sonia Bermúdez, tanto para abrir como para cerrar los osarios.
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Por: Yeeldi Bermúdez G, periodista de LaGuajiraHoy.com @yeeldibeth

En el cementerio Gente Como Uno reposan más de cien cadáveres. «Los muertos que no tienen a nadie, son mi familia»: aseguró Sonia Bermúdez.

Sonia Bermúdez, hizo entrega oficial de un cadáver, a un hijo que hacía más de siete años estaba buscando a su padre Martin Édgar Caro Suárez, los restos se encontraban en un osario de personas identificados pero no reclamadas.

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Sin conocer el paradero de su padre y sin tener indicio alguno de donde podría estar, Yesid Marcelino Caro García, llegó hasta Riohacha en búsqueda del cadáver de su papá, un hombre que falleció a causa de un infarto en el Hotel Tamaití, en el año 2008 cuando visitaba la capital guajira.

Caro García, hacía más de ocho años que no sabía de su padre, manifiesta que su última conversación con él fue vía telefónica porque su padre le llamó para que fuera a reclamar 50 mil pesos que le había depositado desde un Efecty en Valledupar y le contó que cambiaría de número y desde entonces no hubo más comunicación.

Esperó ansiosamente poder hablar con él nuevamente, llamada que nunca llegó a su celular. Lo buscó en varias ciudades, sin respuesta alguna. Luego, puso el denuncio de desaparecido a nombre de Martin Édgar Caro Suárez de 54 años de edad, y oriundo de Barbosa, municipio de Santander.

La búsqueda continuó y con esfuerzos pidió ayuda a algunos amigos que trabajan en la Fiscalía, para que le ayudaran a investigar dónde podría hallarlo. Duraron mucho tiempo sin tener algún indicio, y aún continuaba el desespero y la angustia de Yesid por saber qué hacía su papá, qué comía, dónde dormía y cuál era el lugar dónde se encontraba.

Años después, le comentaron que en Riohacha hay una persona que se dedica a sepultar personas sin familias, los NN. y que posiblemente, en el cementerio Gente Como Uno, podría hallarlo.

Sonia Bermúdez, la mujer que le tiene un aprecio especial a los muertos, comparte con ellos su cumpleaños y cada vez que alguien muere y no tiene familia, ella con sus vecinos, lo sepultan cristianamente.
Sonia Bermúdez, la mujer que le tiene un aprecio especial a los muertos, comparte con ellos su cumpleaños y cada vez que alguien muere y no tiene familia, ella con sus vecinos, lo sepultan cristianamente.

El joven, se contactó con Sonia Bermúdez, la reconocida sepulturera guajira, y le manifestó su inquietud, le describió las características de aquel hombre que incesantemente buscaba, a lo que Sonia respondió haber sepultado a alguien con las características manifestadas.

“Me enteré que la señora Sonia lo recogió sin conocerlo, hicimos indagaciones sobre dónde posiblemente estaría y estamos en el proceso de reconstrucción del hecho y reconocimiento de huesos. Hoy gracias a la señora Sonia encontré los restos de mi papá y podremos darle su cristiana sepultura”, comentó Caro García.

Entre lágrimas, alegría y sentimientos encontrados, Yesid no sabía cómo reaccionar a ésta pérdida, pero a la vez, se mostró contento de haber hallado los restos de su padre. “Gracias a Dios terminó esta incertidumbre de no encontrarlo y no saber nada de él, ni donde estaba, si vivo o muerto, no se sabía en lo absoluto.

Es de tranquilidad saber que siquiera el día que murió tuvo alguien que le dio su cristiana sepultura, y que lo ha tenido durante todo este tiempo. Estoy agradecido con la señora Sonia”. Manifestó entre sollozos.

Asimismo, contó cómo era su padre, dice que era un viajero, casi nunca se sabía dónde estaba porque a veces dormía en Valledupar y al día siguiente estaba en cualquier otra parte del país.

Por su parte, Sonia Bermúdez contó cómo le realizó la cristiana sepultura al difunto Martin Édgar Caro Suárez, a quien se le hizo una necropsia para identificar las razones de su muerte. Él llegó a quedarse en el Hotel Tamaití y en las horas de la madrugada falleció víctima de un infarto fulminante.

Así que, el cadáver quedó en la morgue en espera de que alguien lo reclamara, pero al término de 3 días nadie fue por él, fue allí cuando Sonia fue en su búsqueda para llevarlo hasta el cementerio Gente Como Uno. “Yo lo reclamé, porque los muertos que no tienen a nadie, son mi familia”, aseguró Sonia.

Todos esos osarios debieron abrir en busca de Martin Édgar Caro Suárez, porque la señora Sonia, en esa época que fallecieron los enterraba en el suelo y la mayoría son NN.
Todos esos osarios debieron abrir en busca de Martin Édgar Caro Suárez, porque la señora Sonia, en esa época que fallecieron los enterraba en el suelo y la mayoría son NN.

En este cementerio que reposan más de cien cadáveres, según Sonia, hay algunos 3 o 4  que tienen identificación, pero no han sido reclamados. Sin embargo, manifestó que es de gran satisfacción encontrar el cadáver del señor y que luego de abrir la sexta bóveda se encontró el osario del señor Caro Suárez, con la respectiva bolsa dónde se incluye el nombre del cadáver.

“Qué satisfacción tan grande haberlo encontrado, ya el rostro de tristeza y llanto de este joven se combinó  con la alegría de encontrar y llevarse a su papá” reveló Sonia.