Familiares, amigos y compañeros de trabajo de Diomedes Antonio Ordóñez, I.E. Denzil Escolar, estuvieron presentes en el sepelio de su padre, José Miguel Ordóñez Polo, de 69 años de edad, quien falleció este lunes víctima de un cáncer pulmonar y sepultado la mañana de este martes.
Mediante un culto, oficiado por el movimiento de la iglesia cristiana evangélica a las 8:30 de la mañana, donde muchos de los asistentes se mostraron entristecidos, sin embargo, las palabras que fue dada por la predicadora les ayudó a sentir mayor tranquilidad y paz, al mismo tiempo que la resignación los arropó al aceptar una verdad.
Finalizada la reunión religiosa, los asistentes se dirigieron hasta el cementerio Central de Riohacha a las 9:00 a.m., para darle cristiana sepultura.
“Fue un buen tío, es una persona difícil de olvidarla”, expresó una de las sobrinas del fallecido, quien no quiso identificarse ante este medio de comunicación, pero resaltó todos los trabajos en madera que realizaba en los establos de algunas fincas de departamento del Atlántico.
Su hijo, profesional de la docencia, Diomedes Ordóñez expresó que su padre siempre soñó con dedicarse a la ganadería, pero la vida le demostró que poseía talento para otras áreas como la carpintería. “Desde entonces le gustó ese oficio y su petición en vida era que quería morir en uno de estos espacios, pero debido a su enfermedad, me lo tuve que traer de Barranquilla y pasar los últimos años de su vida conmigo, en casa”, explicó.
Es de recordar, que el fallecido, José Miguel Ordóñez Polo, de 69 años de edad, presentó enfermedades respiratorias, por el consumo excesivo de cigarrillos, generándole años después un cáncer en los pulmones y su posterior muerte en una clínica de Riohacha.
