

Los maestros de manera peculiar, comenzarán a impartir lecciones a un grupo de alumnos en los alrededores de la alcaldía, como medida de presión, a la administración municipal y autoridades educativas del departamento de La Guajira, a reversar la norma que se quiere implementar, sin que las plantas físicas de las escuelas y colegios cuenten con las garantías requeridas, que impidan el contagio y la multiplicación de la covid-19, tanto para los educadores como para los educandos.
“Tenemos 18 meses pretendiendo regresar a clases presenciales, pero los estamentos educativos tanto local como departamental han hecho caso omiso a los clamores de padres de familias, estudiantes y educadores, incumpliendo la norma que los obliga a desembolsar los recursos para que se hagan las inversiones necesarias y contar con una planta física en los planteles para volver a la presencialidad”, dijo el profesor Carlos Julio Gómez.
Indicó que hay que volver a los claustros de enseñanzas, pero cuando estén dotados para el fin que se construyeron y cuyo objetivo es brindar a los alumnos una educación de calidad, es decir que se cumpla con el artículo 67 de la Constitución política que ordena “garantizar el adecuado cubrimiento del servicio y asegurar a los menores las condiciones necesarias para su acceso y permanencia en el sistema educativo”.





