Los tatuajes delataron a Alberto José Finol Virguez, los cuales fueron captados por la cámara de seguridad del establecimiento abierto al público.
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Por: Aileen Díaz, especial para La Guajira Hoy.

Las cámaras de seguridad de una tienda puso en evidencia el hurto del que fue objeto por parte de un hombre, quien irrumpió en horas de la madrugada y se apoderó de una suma considerable de dinero.

Esas mismas imágenes sirvieron para identificarlo siendo fácil reconocerlo por unos tatuajes que tenía en varias partes de su cuerpo y que terminaron siendo prueba irrefutable para su captura e imputación de cargos de parte de la Fiscalía General de la Nación.

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En ese sentido, Alberto José Finol Virguez fue acusado por el delito de hurto calificado agravado, ante un juez Penal Municipal por parte de la Fiscalía sexta Delegada ante los jueces penales municipales de Riohacha.

Todo comenzó cuando en horas de la mañana la señora María Ruedas Salidas abre su negocio observando que no encontraba el dinero producto de las ventas del día anterior, indagando con sus hijos, al ser ellos los encargados de cerrar el local, expresaron que el dinero lo habían dejado en la gaveta del escritorio.

Los tatuajes delataron a Alberto José Finol Virguez, deberá responder por el delito de hurto calificado y agravado.

En efecto, a ello decidió mirar en las cámaras de seguridad del establecimiento y observa que aproximadamente a las 4:00 de la madrugada del mismo día una persona se acerca a las esteras del negocio violentando el candando, logrando el ingreso y apoderándose del dinero en efectivo, en el que habían billetes y monedas de distintas denominaciones, un teléfono celular marca Nokia y unas llaves de un vehículo.

Enseguida la persona abandona el lugar logrando su cometido, llevándose la suma de COP $3.380.000 de los cuales COP $1.500.000 fueron en billetes y COP $500.000 en monedas, las llaves del vehículo avaluadas en COP $1.300.000 y el celular en COP $80.000.

La señora María Ruedas Salidas tuvo el valor de difundir el video al grupo de WhatsApp que tienen los tenderos de Riohacha, observándose los tatuajes que tenía en su cuerpo, siendo prueba importante para las autoridades.

En la audiencia de imputación ante el juzgado segundo penal municipal ambulante, con funciones de control de garantías de Riohacha se formula la imputación por el delito de hurto calificado y agravado, de los cuales Finol Virguez aceptó los cargos pudiendo recibir una pena que tendría un mínimo de 9 años y un máximo de 24.5 años de prisión.