Estas lámparas que han beneficiado a cerca de 34 mil personas en el País, varias empresas del sector privado han decidido apostarle a la iniciativa de llevarles luz a las comunidades indígenas más vulnerables del departamento de La Guajira.
Las organizaciones, pertenecientes a sectores económicos como el e-commerce, textil y creatividad, conocieron de antemano el impacto que ha tenido el programa Luces de Paz, originado en Colombia en el año 2019 por Agencia Social, entidad que vela por apoyar a las poblaciones más necesitadas del país.
Luces de Paz nació a partir de la necesidad de reorientar a jóvenes estudiantes de colegios distritales de Bogotá, con destrezas en el campo de las ciencias, para que no incurrieran en actos delincuenciales.






Al respecto, el director de Agencia Social, Juan David Rojas, manifiesta que “Luces de Paz les ha servido a estas poblaciones vulnerables para que caminen por el desierto en las noches y en senderos oscuros, así como a los niños y jóvenes para que hagan sus tareas en las rancherías y a las familias, en general, les ha ayudado a iluminar diferentes actividades nocturnas”.
Actualmente, esta iniciativa la cual pertenece al programa general denominado Ecochatarreros, se ha venido complementando con talleres y cursos de capacitación, para que los beneficiados aprendan a cuidar y reparar las lámparas, generen conciencia acerca del reciclaje, y a su vez, se conviertan en herramientas que les permitan obtener ingresos a futuro en actividades como el turismo, la gastronomía y el deporte.