Se determinó que durante el tercer trimestre de 2020, en el departamento de La Guajira se identificaron dos áreas importantes de deforestación y 45 detecciones tempranas de deforestación en los municipios de Riohacha, Dibulla y San Juan del Cesar, así lo informó la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional – Usaid y el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales – Ideam.
La evidencia nace desde el proyecto «Detecciones Tempranas de Cambios en Ecosistemas Claves del Caribe y la Orinoquía Colombiana«, liderado por el Programa Riqueza Natural, de Usaid y el Ideam.
Los puntos de deforestación se ubicaron en las subzonas hidrográficas del Río Tapias, Río Ancho; otros directos al Caribe, Río Ranchería y Alto Cesar.
En cuanto a las zonas tempranas de deforestación los corregimientos de Cotoprix, Las Palmas, Tigreras y Matitas, y el resguardo Kogui-Malayo-Arhuaco en jurisdicción de Riohacha son puntos claves. La principal causa de deforestación en este sector corresponde a la ampliación de la frontera agrícola en áreas no permitidas, a través de quemas que afectan áreas de bosque natural y en menor escala la tala ilegal.
Por su parte, en Dibulla, en los corregimientos de Mingueo, Palomino y la Punta de los Remedios, la principal causa de deforestación está asociada a la ampliación de la frontera agrícola en áreas no permitidas y en menor proporción a cultivos de uso ilícito.
En el corregimiento de Caracolí y las veredas Cardones, La Peua y Sabana Grande, jurisdicción de San Juan del Cesar, la deforestación es producto de la frontera agrícola en áreas no permitidas a través de quemas que afectan áreas del bosque natural.
CorpoGuajira continuará ejerciendo control y vigilancia de los recursos naturales y seguirá apostándole a la conservación y cuidado de la biodiversidad.