En plena noche, alrededor de las 11:00 p. m., un mensaje de urgencia del gobernador de La Guajira, Jairo Aguilar Deluque, sacudió las redes sociales. A través de su cuenta en X, el mandatario pidió ayuda desesperada para trasladar a una bebé de apenas 16 días de nacida, perteneciente a la etnia Wayuu, quien se encuentra en estado crítico y cuya vida pende de un hilo.
Un llamado
“Hago un llamado público. Después de haber agotado todas las instancias, no hemos recibido la ayuda necesaria para atender esta emergencia que se presenta en la Alta Guajira”, expresó el gobernador Aguilar Deluque. El mensaje directamente va dirigido a las autoridades militares y de Policía, buscando una respuesta que hasta el momento ha sido esquiva, dejando a la pequeña ya su familia en una situación de angustia.
Vías intransitables y precarias
La infanta se encuentra en el centro de salud del corregimiento de La Flor, una remota zona rural del municipio de Uribia. Las condiciones del lugar son precarias y el acceso por tierra está prácticamente cerrado debido al mal estado de los caminos de herradura, los cuales fueron construidos por la propia comunidad, pero que las fuertes lluvias se han convertido en intransitables.
En esas condiciones, el traslado terrestre es imposible, y con ello, la posibilidad de salvar la vida de la pequeña se reduce cada minuto que pasa, ya que su situación es crítica: está conectada a una bala de oxígeno que está a punto de agotarse.
Falta de comunicación
Esta región de La Guajira sufre de graves problemas de comunicación, especialmente durante las temporadas de lluvia, cuando las vías se tornan inservibles. El gobernador ha explicado que la salud de la niña se deteriora rápidamente. “Sus niveles de saturación están bajando y el oxígeno con el que cuenta se está acabando. Me informan desde el centro de salud La Flor que la situación es muy delicada y que, debido a las malas condiciones de las vías, no ha sido posible su traslado al hospital de Nazaret ni hacerle llegar una nueva bala de oxígeno”, señaló Aguilar.
El gobernador también hizo un llamado urgente a la solidaridad y cooperación de las entidades pertinentes, recordando que no es la primera vez que una situación de esta naturaleza ocurre en la región. De hecho, el pasado martes 24 de septiembre del 2024, dos mujeres embarazadas de la misma etnia Wayuu también se encontraron en una situación crítica y tuvieron que ser evacuadas en helicóptero.
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Deterioro de las vías afecta emergencia
Esta situación se presenta ahora debido al deterioro de las vías por las intensas lluvias, tampoco fue posible trasladarlas por tierra, lo que llevó a que se gestionara su traslado aéreo a una clínica en Riohacha. Allí, ambas mujeres ingresaron directamente a la unidad de cuidados intensivos (UCI) por el alto nivel de complejidad.
La falta de infraestructura agrava la situación en la Alta Guajira
El panorama es sombrío para los habitantes de esta zona de la Alta Guajira, donde la distancia y el mal estado de las vías agravan cada emergencia médica. La situación actual de la pequeña infanta Wayuu pone de aliviar, una vez más, la necesidad de mayor infraestructura y recursos en esta apartada región del país, donde la vida de muchos depende, en gran medida, de una ayuda humanitaria.