Trascendió al mediodía de este domingo sobre la aprehensión de tres ciudadanos oriundos del departamento de La Guajira, quienes estaban señalados de pertenecer a una organización de traficantes de drogas que la despachaban desde el Departamento a mercados internacionales.
La investigación criminal que duró más de 36 meses, dando inicialmente con la captura de Eduardo Emilio Sierra Esquivia, conocido en el mundo como alias Yayo, que según las autoridades sería el líder de la organización de narcotraficantes y a cinco personas más, quienes estarían a su disposición para trabajar en la organización para enviar droga al exterior.
El proceso investigativo lo realizó la dirección de antinarcóticos de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Fiscalía General de la Nación y la Sociedad de Activos Especiales (SAE), quienes llevaron a cabo un operativo en el que capturaron a seis narcotraficantes.
El jefe del servicio de Policía contra el narcotráfico, teniente coronel Andrés Arias Buitrago, indicó que, “cayeron cinco de sus colaboradores quienes eran los encargados de la copio seguridad y transporte desde la Alta Guajira, estos sujetos están vinculados con el clan familiar Amaya, organización que fue desarticulada en el año 2023 y los cuales estarían al servicio de los carteles mexicanos del narcotráfico”.
Uno de los guajiros capturado es Ricardo Elías Meza González, de 64 años de edad, oriundo del municipio de Manaure, a quien se le conoce entre sus familiares, amigos y conocidos como Ricardito, que según la inteligencia, se encargaba de contratar personal de la seguridad y el embarque del alucinógeno. Otro integrante capturado fue identificado como Ángel Gómez se encargaba de adquirir y acondicionar los medios de transporte marítimo.
Igualmente, apresan a dos más guajiros; ellos son: Cristóbal Mega y Lorenzo Epieyu, indígenas de la etnia Wayuu quienes eran los responsables de almacenar y acumular los grandes alijos de cocaína del grupo criminal en las rancherías indígenas, situadas en la zona costera.
Entre ellos se encontraba un individuo conocido con el alias de Rafael Balceiro, quien estaba encargado de organizar las reuniones y coordinar la logística necesaria para el transporte de la droga hacia su destino final a través de lanchas rápidas.
“En el municipio de Manaure y en la ciudad de Barranquilla, mediante proceso de extinción de dominio a esta organización, se ocuparon cuatro bienes: un establecimiento comercial, una vivienda y dos vehículos avaluados en 1.500 millones de pesos, los cuales serán dejados a cargo de la Fiscalía General de la Nación y la Sociedad de Activos Especiales”, agregó el jefe del servicio de Policía contra el narcotráfico.
